Individual 1 - Gustavo Mejía Moreno
La pandemia del SARS Cov-2 ha hecho que todos nos quedemos en casa, regulando nuevas costumbres como las clases en línea, el home office y la demanda del entretenimiento mediante plataformas de streaming. Así mismo durante más de 6 meses intensivos, muchas de las pequeñas y medianas empresas han cerrado por falta de clientela y los servicios de comida a domicilio siguen incrementando
Esto ha hecho que la mayoría del año en cuarentena se redujera el consumo de energía eléctrica en las empresas y se aumentara el consumo del hogar; Aunque es cierto que la demanda se incrementa cada día, se puede decir que durante algunos meses se regulo la demanda de electricidad entre las personas y la industria
Hace algunos meses volvimos a semáforo amarillo y esto significa que las personas otra vez salen de sus casas para abrir negocios y empezar a generar dinero para subsistir, pero la pandemia aún representa un riesgo para todos los estudiantes menores de edad, que por lo tanto toman clases en línea.
El consumo de estas 2 partes ha aumentado significativamente el consumo de la energía (más por el de las industrias)
Peor aún es que el gobierno como el país no ha proporcionado las energías sustentables propias para que el consumo de electricidad no genere un problema para el medio ambiente.
Esta nueva normalidad nos ha hecho aún más consientes de cómo nuestro consumo afecta al planeta, desde una colonia hasta el país entero
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